Hace casi dos meses, finalmente hice una de mis metas realidad: dictar mi primer workshop.
Tuvieron que pasar seis años para que se trasladara de mis pensamientos a hechos, dejando de lado el miedo y los nervios. Así nació “The Key Workshop”.
He tardado en publicar este post porque les tengo una noticia que compartir, a raíz de lo acontecido en el workshop. La podrán encontrar al final de este post, pero primero los invito a que lean lo ocurrido este 14 y 15 de julio.
Como comenté en mis redes sociales y a los asistentes antes del curso, el workshop lo dediqué a mi fiel compañero Lucky, que se convirtió en un angelito dos días antes del mismo. Él me acompañó en mis noches de desvelo mientras hacía el curso y siempre que lo necesitara durante trece años.
No fue fácil tener una sonrisa de oreja a oreja, cuando horas antes del curso tenía los ojos hinchados de llorar. Gracias Dios por darme las fuerzas y paz necesarias para dar lo mejor de mí. Gracias también a todos por sus palabras de aliento, créanme que leí cada uno de sus mensajes y me ayudaron de igual manera.
Al llegar a Harmonny Studio, quedé enamorada con la decoración que realizó Kathy Villaverde. Todo era tal cual lo habíamos imaginado y no pude haber dejado ese trabajo en mejores manos.
Cada asistente tenía su puesto indicado con su nombre y un folder con recomendaciones personalizadas, basadas en preguntas que les realizamos previamente al workshop, entre otros detalles más.
Frente a mi tenía a doce personas con muchas ganas de aprender y seguir sus sueños.
Desde la capital, Santiago, Chitré, Chiriquí y hasta desde Costa Rica, conformaron las doce personas que se atrevieron a formar parte de esta experiencia sin tener idea alguna de cómo podría ser el resultado.
A ustedes doce, ¡GRACIAS!. Gracias por confiar en mí, por confiar en mi trabajo y por brindarme esta hermosa oportunidad de compartirles lo que sé.
Esta es mi cara de “… llegó la sección de preguntas” (Note to self: debo mejorar esa cara).
La verdad es que me encantaba estas secciones para poder contestar todas las dudas que iban surgiendo. No sólo ellos aprendieron de mi, sino todos en conjunto.
También contamos con la intervención de nuestros amigos de Wuik y Picturage Studios, quienes les compartieron la importancia de una buena imagen corporativa y la ventaja de usar videos como medios de marketing.
Luis, el único chico del grupo, celebró su cumpleaños en el curso. Me comentó desde un inicio que ese sería su regalo de cumpleaños, por lo cual no pude dejar pasar esa ocasión por alto.
Espero que a la próxima se animen más chicos. Créanme que me la pasarán súper bien (y hay brownies 😉 ).
Pasaron de ser desconocidos a amigos en tan sólo dos días. Dos meses más tarde les puedo contar que aún nos seguimos ayudando entre todos para poder cumplir esas metas y sueños, con las que llegaron a The Key Workshop.
Después del curso quería llorar pero, esta vez, de lagrimas de felicidad. Me sentía complacida con lo realizado y mucho más aún cuando empezaron a llegar emails de todos los participantes, con palabras de agradecimiento y felicitaciones.
Terminé el workshop diciéndoles que esto apenas era el inicio de muchas cosas que tengo preparadas para los amantes de la fotografía.
Hoy les quiero compartir la nueva sección de mi página web, dedicada especialmente para ustedes: “For Photographers“
En ella podrán encontrar los próximos Workshops, one on one (intensivos) y coaching, que estaré dictando a partir de ahora. Es algo diferente a lo usual, por lo que los invito a que ingresen y lean de qué se trata cada uno.
Les adelanto que The Key Workshop 2, será el 17 y 18 de noviembre. Podrán encontrar más info en “For Photographers”.
Estoy muy emocionada de poder ayudarlos y de compartir junto a ustedes sus sueños. He hecho esto con mucho cariño por lo que espero que les guste.
Acá les dejo un video resumen de lo ocurrido en The Key Workshop.
[vimeo=https://vimeo.com/138577392]