Hay  parejas que a pesar de que tienen personalidades distinta se complementan de una manera tan única que enamoran. Karol y Paulino son una de ellas. Desde el primer momento en que los conocimos nos pudimos percatar de esto y se notaba que estaban hechos el uno para el otro.

En la sesión pre-boda fue muy divertido compartir con ellos ya que pudimos conocerlos mejor. En lo personal me encanta cuando las parejas hacen algún cambio temático y Karol y Paulino no se quedaron atrás, ellos se tomaron fotos con el uniforme de su equipo favorito de baseball, Los Santos.

El día de la boda llegó más rápido de lo que esperaba y gracias a Dios nos acompañó un sol de verano durante toda la ceremonia. Me fascinó la iluminación angelical que habitaba por todas partes de la iglesia y la música del coro que la acompañaba. La sonrisa de los novios no faltó en ningún momento y se sintió su emoción durante toda la misa.

Por otra parte no faltaron los toques típicos, tanto en la ceremonia como en la recepción, telas de encaje de pollera, acordeones, el primer baile al ritmo de un pasillo y por supuesto la murga y todos los accesorios característicos de un carnaval. Todos los invitados bailaron hasta más no poder y disfrutaron muchísimo de la celebración.

Karol y Paulino, les deseo que Dios los bendiga en esta nueva etapa de sus vidas. Muchas gracias por elegirnos y permitirnos capturar su boda.