Los que me conocen, saben que soy una persona que habla hasta por los codos. Aún así, hay muchas cosas que pienso y que nunca comparto, pensando que los demás lo tienen por sentado.

El hecho de que varios de mis primos se estén casando este año, me ha dado la oportunidad de compartirles mis sentimientos públicamente (a través de mi blog), en uno de los momentos más importantes de sus vidas.

Milciades es una persona digna de admirar e imitar. Con su amor incondicional por su familia, su excelente humor y carácter tan jovial, es una pieza imprescindible en nuestro loco rompecabezas familiar.

A pesar de que esto me pone a llorar desde que lo escribo, me hace muy feliz poder revivir todos los momentos junto a ellos.

Esta boda en especial, siento necesaria empezarla de una forma diferente.

Érase una vez, una chica llamada Maruquel y un joven llamado Milciades. Ella, una bella durmiente con su fascinación por dormir, él, un fanático del fútbol. Un gusto en común, haría que sus vidas se cruzaran: el amor por el folclor.

Bailaban juntos en el conjunto típico “Mi Orgullo es Panamá”. A pesar de que en un inicio prácticamente no se hablaban y que a ella le parecía que él era un poco ridículo, Dios les mostraría que estaban destinados a estar juntos.

Al conjunto le salió un viaje a Mexico y fue allí donde se hicieron amigos y empezaron  a conocerse. Pasó un poco más de tiempo para que el amor llegara a surgir entre ellos.

Desde el día uno, mi primo ha sabido tratar a Maru como la reina de su corazón, con su caballerosidad, entrega y dedicación. Maru definitivamente se consiguió a un príncipe azul.

Hace varios meses, como cada mañana, me levanté y vi mi celular. Como siempre, el grupo de mi familia tiene muchos chats (de algún lado tenía que salir hablantina), pero en esta ocasión era diferente y eran muchos más de lo normal.

Subí rapidamente la conversación para saber de qué se trataba, cuando me encontré con la foto de Maru, con un anillo en la mano. La emoción era indescriptible y la historia de la propuesta, mucho más hermosa aún.

Maru y Milo se encontraban en China de paseo, con la familia de Maruquel. Aprovechando este viaje tan diferente, Milo quiso hacerlo mucho más inolvidable. Cuando fueron a visitar el “Templo del Cielo”, ya había planificado todo para hacerle la gran pregunta en ese lugar.

La prima cómplice le dijo a toda la familia que quería una foto en la escalera, pero en forma de triángulo, con Milo en uno de los últimos escalones.

Mientras tomaba la foto ella pidió que se voltearan para que salieran “mirando al templo” y ahí se encontraba él arrodillado. Maru se tapaba la boca impresionada y emocionada, mientras Milo entre nervios y lágrimas, le pedía que fuera su compañera por el resto de sus días.

¡Oficialmente Sr. y Sra. Solis!

Al llegar a la recepción, realmente te sentías como en un cuento de hadas. Desde el carruaje de Cenicienta y los dulces de Alicia en el país de las maravillas, hasta la estación de té de La Bella y La Bestia; todo te hacía suspirar de ilusión.

Adicional, podían verse varias de las fotos que les tomé en su pre boda (link aquí), vestidos como las princesas y príncipes de Disney.

“Lo que más me gusta de Milo es su gran corazón, aunque es muy crítico, en el fondo es MUY sentimental. Me encanta su determinación, cuando se propone algo no descansa hasta cumplir con su objetivo. Me gusta mucho que sea justo, a pesar de todo lo que pase siempre trata de no juzgar. Es una persona muy divertida, inteligente, súper responsable y analiza todo.”- Maruquel

“Lo que más me gusta de Maru es su sencillez, su carácter, don de gente, amor por los animales (que me lo contagio) y hasta su amargura. Una persona que siempre está dispuesta a aprender y apoyar. Es mi complemento, mi equipo, mi lado opuesto pero que juntos somos dinamita.” – Milciades

A pesar de lo sentimental que soy, había contenido mis ganas de llorar, hasta que llegó el primer baile como esposos.

Al ritmo de canciones de Disney, hicieron una coreografía digna de unos príncipes. Involucraron a sus papás en la misma, quienes son sus ejemplos a seguir en esta nueva aventura que emprenden. Fue mi momento favorito de toda la boda.

Creo que todos estábamos a la expectativa de la hora loca de esta boda. Se puede decir que trasladaron el carnaval de Las Tablas, hasta Playa Bonita.

Esto me trajo varios flashbacks del 2013, cuando Maru fue reina de Calle Arriba. El apoyo que le dio Milciades fue inigualable y estoy segura que, en cualquier otro sueño o meta que se propongan, estarán para ayudarse mutuamente.

Cada uno de los presentes disfrutamos de la murga, tamborito y conjunto típico que llevaron. ¡Hasta Mickey y Minnie saludaban y tiraban besitos!

Primos, muchas gracias por permitirme capturar y vivir esta hermosa aventura junto a ustedes. Confiaron en mi talento y el de mi equipo, para capturar uno de los días más importantes de su vida.

Verlos tan felices y que lo disfrutaran al máximo, era lo más importante para todos nosotros. Todo un cuento de hadas, cuyo próximo capítulo inicia con un “vivirán felices para siempre…”, primero Dios. ¡Los quiero mucho!

Para ver más fotos de este día, puedes ver el slideshow acá