A medida que el amigo lo iba conociendo, cada vez le caía mejor, por lo que no despreciaba un momento para promocionarlo con ella y llamarlo “the one”. Lo describía como inteligente, de buenos valores, con una personalidad chispa, el tipo de persona que quería para ella (no podía pedir menos para ella, que tiene unas cualidades excepcionales).
Por su lado, a Fátima le parecía genial que su amigo le comentara todas esas cosas, pero que el día que Ahmed la quisiera conocer, él mismo buscaría su manera de hacerlo por su propia voluntad.
En realidad, ambos se conocían desde niños, ya que ambas familias vienen del mismo pueblo de la India y siempre han guardado buena relación. Aún así, cuando fueron creciendo, cada uno hizo su camino y vidas por separado, sin saber que se volverían a unir varios años más tarde.
Aproximadamente un año después, Ahmed se atrevió a dar el paso y les comentó a los amigos que tenían en común, que quería conocerla.
Sin el conocimiento de Fátima, organizaron un almuerzo para que finalmente se diera el encuentro que varios habían estado esperando. Aún así, para la sorpresa de Fátima, la persona que tanto describían, ese día no estaba presente.
Al parecer los nervios dejaron mudo a Ahmed, que si acaso dijo palabra durante todo el almuerzo. A pesar de esta no tan buena primera impresión, él no se rindió y al día siguiente pidió su número para entrar en contacto con ella.
A partir de ese día, los mensajes no faltaron y poco a poco fue creciendo una bella amistad entre ambos, que luego dio paso al inicio de su relación como pareja.
No tengo palabras para describir esta hermosa decoración…
Finalmente el día de la boda llegó y yo no podía estar más emocionada. Tuve el placer de cubrir la boda de Khatiya, una de las hermanas de Fátima, por lo que fue un honor poder capturar también esta bella historia.
Nuevamente gracias a la familia Asvat por su hermoso trato y confianza en nuestro trabajo. Significa mucho para mí y saben que quedo a la orden para las próximas bodas. ?
Apenas llegamos a la recepción, TODO parecía de película. Al menos yo me sentía en una y no podía pedir menos de sus protagonistas. Con su espontaneidad, felicidad y lo fotogénicos que son, lo hacían todo mucho más fácil.
“Hubo momentos en que ella me quería matar, pero creo que luego de conocernos más, nos dimos la oportunidad de entablar una relación de noviazgo y bueno aquí estamos, listos para unir nuestras vidas.” – Ahmed
Muchas veces me han recalcado la suerte que tengo de tener una trabajo, donde siempre me buscan por motivos de celebración y felicidad. Siento que más que suerte, es toda una bendición, poder ser la encargada de capturar estas alegrías y guardarlas para la posteridad.
“Me gusta que Ahmed es una persona inteligente, de buenos valores, y un hombre de familia. Además, ¡me encanta la tranquilidad y estabilidad emocional que me da! Desde el comienzo me he sentido muy cómoda con él, como si siempre hubiésemos sido amigos y ahora simplemente nos estamos reencontrando.” – Fátima
“Dicen que el cuerpo atrae, pero la personalidad enamora. Fátima tiene una forma de ser única, la paz y tranquilidad que me hace sentir cuando estoy con ella, además de sus besos y su mirada intimidante, son las cosas que más me gustan de ella.” – Ahmed
Fátima y Ahmed, bodas como la suya, jamás se olvidan. No está de más que les diga que hacen una hermosa pareja, la química es innegable y me encanta la complicidad que se tienen. Fue realmente un placer para mí y todo mi equipo, poder formar parte de este día tan especial en sus vidas.
Nuevamente gracias por permitirme subir algunas fotos de su boda, significa más de lo que pueden pensar. Estoy segura que su historia hará suspirar a muchos e inspirará a varios más.
¡¡¡Muchas felicidades!!!