Denisse es panameña y Sam es estadounidense y desde el momento que los conocí faltando unas horas para el gran día, supe que se complementan de una manera perfecta.
Les confieso que la mayoría de estas fotos casi casi no se consiguen porque, poco antes de la ceremonia, empezó a llover muy fuerte.
A medida que se acercaba la hora, propusieron cambiar los planes para interiores porque no se veía esperanza de que fuera a mejorar, pero fue tanta la convicción por parte de la novia (y todos los que ahí estábamos), que el clima hizo caso.
El cielo se liberó, salió el sol y tuvimos un atardecer súper lindo. Se nota la felicidad en la cara de Denisse y Sam al ver que todo salió como ellos soñaban. Fue demasiado divertido fotografiarlos y compartir con ellos este día tan especial.
Qué lindo poder unir dos culturas y celebrar el amor de una manera tan especial.
Que confíen en mí para cubrir una boda, es algo que valoro como no tienen idea. Pero, si adicional me piden que viaje a otro país porque quieren que sea yo quien capture su día especial, significa un mundo para mí.
¡Gracias por permitirme capturar su alegría!
Les deseo toda la felicidad del mundo.