Ya tienes tu equipo fotográfico, conoces la técnica y sabes tomar fotos, amas lo que haces, pero a pesar todo esto, te cuesta mucho conseguir clientes y que las personas conozcan tu trabajo.
No te preocupes que no eres la única persona a la que le ha pasado esto. Sin lugar a dudas, este es uno de los retos a los que la gran mayoría se enfrenta y me lo han hecho saber a través de varios emails y mensajes.
Lo que he podido concluir a lo largo de estos años, es que muchas veces olvidan ver la fotografía como un negocio (en el caso de que quieran obtener ingresos del mismo). Este cambio de mentalidad es muy necesario, para poder tomar acciones sobre lo que hace falta para conseguir nuestros objetivos.
Desde el momento en que decidimos convertirlo en nuestra fuente principal de ingresos, son varias las tareas que tenemos que llevar a cabo para que sea rentable. Una de esas es el mercadeo de nuestros servicios.
Tienes que tener claro que lo que no se ve…¡NO SE VENDE!
Es SÚPER importante mantenernos visibles, atractivos, en constante crecimiento y aprendizaje, para poder hacer ingresos de esto que nos apasiona. Lo bueno es que ya estás tomando acción sobre lo del aprendizaje así que vas por muy buen camino.
En estos años que llevo como fotógrafa, he puesto en práctica varias herramientas que me han servido de mucho y me han ayudado a darme a conocer, que las personas recomienden mis servicios y que mi agenda esté llena con meses de anticipación.
Hoy quiero compartirte 5 tips que he me han funcionado a la perfección, para que tú también puedas ponerlos en práctica:
- Planificación: una de las claves para ser un fotógrafo exitoso, es ser organizado. Definir todo lo que vas a hacer en tu negocio con días, semanas o inclusive meses de anticipación, te ayudará a tener una idea más clara de los objetivos que quieres alcanzar y a preparar todo lo que necesitas para alcanzarlos. Si vas a promocionar un nuevo servicio, publicar fotos referentes a una celebración en específico o un concurso para darte a conocer, todo debes decidirlo con tiempo para que no estés haciendo todo de forma apresurada.
Como bien dice el dicho: el apuro trae cansancio. Además del cansancio, también te puede generar varios gastos que no contemplabas, por el simple hecho de no planificarte. - Aprovecha los videos: aunque nuestro mundo fotográfico es más estático, hoy día los videos tienen un gran posicionamiento que te pueden ayudar a darte a conocer de una forma más eficiente. Con tan solo compartir un detrás de cámaras, créeme que las personas podrán tener una mejor conexión con la persona detrás del lente.
No solo tienen que ser videos en movimiento. Puedes aprovechar las fotos que has tomado y hacer un slideshow, que por experiencia sé que también llaman muchísimo la atención, gracias a la combinación de la música y desplazamiento de las fotos a lo largo del video. - Cuida los textos: no te enfoques únicamente en vender cada vez que publicas algo. Asegúrate de contar historias no solamente con tus fotos, sino también a través de las palabras.
Atrás quedaron las frases motivacionales o pedazos de canciones para poder “decorar” tu foto. Habla directamente a tus seguidores o clientes potenciales para que “lean tu voz” y puedan saber lo que pasa por tu cabeza.
Algo muy importante en este punto es que cuides muchísimo tu ortografía y sintaxis, porque caso contrario puedes generar el efecto opuesto y podrían no tomarte en serio.
- Invierte en publicidad: aunque la interacción orgánica es muy importante, la publicidad paga te ayudará a atraer específicamente a tu cliente ideal. Invierte una cantidad determinada de manera mensual, dirigida exclusivamente a las publicidades de tu negocio. De esta forma podrás expandir tus horizontes y llegar a nuevos mercados que podrían estar interesados en lo que tú ofreces.
- Muestra el lado humano: con la era digital a muchos fotógrafos se les olvida que mostrar el lado humano es de las cosas que más genera confianza en el internet. Si solo te enfocas en publicar los resultados de tus fotos en todas las plataformas y no te muestras aunque sea una vez al mes, por mucho que sea gustado tu trabajo, será más complicado convertir a un observador en un cliente.
Sé que a muchos no les gusta estar frente al lente, pero llegó el momento de salir de esa zona de confort poco a poco, si lo que buscamos es vivir de nuestra pasión y convertirla en nuestro negocio. Recuerda que lo que no se ve, ¡no se vende!
Ahora cuéntame: ¿Cuál de todos fue tu tip favorito? ¿Lo pondrás en práctica pronto?
¡Espero tus comentarios!
Un abrazo,
Liz
2 respuestas
el consejo que mas me gusto es el del tercero , “cuida los textos”, me gustó e idealizo sobre la fotografía mas unas buenas palabras puede ser vendida como una buena experiencia, como lo dices contando historias al final creo que es un gran valor agregado para los que queremos vivir de esto.
Lo que no se ve, no se vende.
Muy bueno 👌