Era el sábado antes de las elecciones y, como me interesa tanto el tema de política (nótese el sarcasmo), estuve toda la tarde metida en mi computadora diseñando el logo para “mi negocio de fotografía”.
Sólo había hecho unas “sesiones de fotos” a mi hermana y a sus amigas que, gracias a Dios, muchos las miraron con ojos de amor y decían que estaban espectaculares. Debido a esto, consideraba que ya tenía el “go” para empezar a ser fotógrafa, aunque ni siquiera supiera manejar mi cámara en modo manual.
El 2 de mayo de 2009, además del logo, hice mi página de Facebook y con eso empecé a mercadear mis servicios, a través de redes sociales y en los recreos de la escuela.
No pasó mucho para que mi mamá me sacara mi Aviso de Operaciones (que yo no tenía ni idea lo que era, ni para qué servía), pero al ver que lloraba emocionada diciendo que tenían una emprendedora en la familia, me imaginé que se trataba de algo importante.
No sé si el hecho de tener 17 años me tenía muy relajada en cuanto a todo lo que involucra tener un negocio, pero sinceramente no tenía idea lo que se avecinaba: trabajar los fines de semanas y días libres del colegio; tomar cursos para aprender la técnica; ahorrar para ir adquiriendo poco a poco más equipo; buscar cualquier rincón de mi casa para establecer mi oficina; editar hasta largas horas de la noche y hacer que los clientes confiaran en mí, a pesar de mi edad (sin mencionar el estrés, lágrimas y cansancio), eran cosas para las que no cualquier adolescente se prepara. Aun así, las ganas y pasión por lo que hacía, me hacían seguir adelante.
Lo que quiero contarles con esto, es que yo he pasado por muchos ensayos y errores que me han ayudado a estar donde me encuentro hoy: despierto cada día con ganas de querer superarme a mí misma; nunca he sabido lo que es trabajar para alguien más; cuento un negocio de fotografía sólido en Panamá; realizo coberturas a nivel internacional y sí, vivo de la fotografía, por muy raro que pueda sonar a varios.
Si yo, que no sabía ni siquiera manejar una cámara, pude conseguirlo, ¡ustedes también pueden! Lo importante es que sus motivos sean más grandes que sus excusas, para que realmente puedan alcanzarlo.
Si quieren esquivar varias piedras del camino y que les ayude en ese trayecto, entonces “The Click” es la mejor opción para esto. Ya sea que estén empezando o se sientan estancados en donde se encuentran, la idea es que puedan llegar a su próximo nivel y sigan soñando en grande.
Acá pueden ver la información completa: www.lizpinto.net/the-click .
Un abrazo,
Liz
5 respuestas
Waou, es algo increíble, sabes, nadie a llegado a este mundo sabiendo hacer lo que hace. Tenemos que ir creciendo y buscar la inspiración en todo para poder sostenernos y continuar haciend o lo que realmente queremos hacer y lograr, tu post me ha llegado en tan buen momento, estuve apunto de vender mi equipo, porque sentía que no iba a poder (ya no he podido tomar fotos por falta de tiempo) y por ver que no le sacaba el potencial que quería, me exigido demasiado a mi mismo y he sido tan poco tolerante con migo y mi equipo que casi se me olvida que necesito de práctica, se ne olvidó que mi cámara es sólo mi instrumento y que la creatividad yo la pongo, se me olvidó que soy humano y que necesito adquirir práctica. Eres increíble y tu trabajo es esepcional. Saludos desde México ^-^
La verdad siempre que me siento desganada, llegas tu con un post y palabras que hacen falta escuchar !!! Eres la mejor Liz ! Y gracias x que aunque avcs pensemos que no se puede lograr, nos animas … viendo, que si tu lo lograste a nosotros nada nos lo impide !
¡Claro que se puede Lineth! ¡Adelante! 😀
Muy sincera y directa en expresar tus ideales…Te felicito la juventud y el animo son razones importantes, NUNCA SE DEJA DE APRENDER DE UNO MISMO Y DE OTROS..
Gracias por tan lindos comentarios, los aprecio mucho 🙂